jueves, 16 de julio de 2015

Jardines

Hoy te echo más de menos que nunca. Te recuerdo a menudo y te tengo presente en mis conversaciones a diario. Recordar tu sonrisa reflejada en los cansados ojos de mi madre me hace presagiar una nueva pérdida, me hace necesitar un abrazo para aferrarme a quién está aún a mi lado. 
Te fuiste diluyendo, dándonos chispazos de tu presencia con tus gestos y voz llena de temblor. Te echamos de menos, mucho, eres tan parte de nosotros que estas presenté aunque ya no estés. Nuestras sonrisas no volvieron a ser completas, una reunión sin ti adolece de tu ausencia, se te recuerda permanentemente. Dile a tu padre que baje el puente que une la vida y la muerte, dile a tu madre que te deje venir a vernos aunque sólo sea un momento. Agárrate fuerte en el viaje, no sea que el temblor te haga soltarte. Acuérdate, ropa interior limpia y nueva.

Mil besos y uno más. Te echo de menos abuela.